La vida no es como el teatro, que puedes ensayar las veces que quieras, hasta que te salga bien. Tienes que arriesgarte. Y cuando lo consigas, no esperes que te aplaudan y se baje el telón.
Temiá fracasar hasta que me dí cuenta de que unicamente fracaso si no lo intento.Temía lo que la gente opinara de mi hasta que me di cuenta de que de todos modos seguirían haciendolo. Temía el dolor, hasta que aprendí que éste es necesario para crecer.Temía la verdad, hasta que descubrí la fealdad de las mentiras.Temía al ridiculo hasta que aprendí a reirme de mi misma.
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